Ley de Murphy…

Cómo de extraña que es la suerte… Cuando uno está apaciblemente al vicio nadie lo habla, pero basta que uno esté hasta las pelotas de trabajo para que todo el mundo lo llame sin razón aparente cuando hace años que ni siquiera se sabe de ellos…

Hoy me pasó… Más allá de la gente que me habla siempre y de la gente con las que estaba trabajando, hoy me habló todo el mundo, en parte porque dije que me pasaran sus teléfonos porque perdí toda la agenda cuando me robaron el celular (ver Carta Abierta…) y en parte por simple ley de Murphy…

Así que me hablaron desde mi ex-algo(Fabi) hasta alguno q otro indeseable, pasando por algunos compañeros del colegio, y mi pobre diagrama de colaboración veía que el tiempo pasaba sin cambios sustanciales, y a mis compañeras de trabajo, aumentar su odio hacia mí, el cual ya debe estar debidamente fundamentado, jeje…

Y escribo mientras ellas le dan un último retoque a las cosas que faltan, a ver si hace falta algo más, seguiré dando vueltas por acá… Saludos mis queridos lectores(saludo quemado de la 1 de la mañana)